Normas de inseguridad | Almu Ballester

13 Prólogo Clara Obligado Cuando me preguntan qué tipo de cuentos me gus- ta vacilo pensando si es posible elegir, dentro de la variada producción actual. Pero sí hay dos elemen- tos que me parecen indispensables para que un texto tenga sabor, y que podría resumir en aquella máxima famosa que dice: «Todo buen cuento guar- da un secreto», que nadie sabe ya si pertenece a Erskine Caldwel o a Andrés Neuman o a la simple esencia lógica del género. El otro elemento impres- cindible, bajo mi punto de vista, consiste en la cer- teza de un trabajo lingüístico depurado. Dicho esto, quiero añadir que me gustan los cuentos de todas las formas y colores, poéticos, pa- téticos, realistas, fantásticos, con o sin historia. Pero no me gustan los cuentos evidentes ni los que pre- sentan una ignorancia del instrumento base de la escritura, y que es el idioma. Luego están el gusto, el momento en el que leemos, las opciones personales. Nuestra histo- ria como lectores. Las filias y fobias inexplicables. Aquello que envidiamos, lo que somos incapaces de escribir, ya que no sabríamos cómo hacerlo. Hay autores que disfrutan leyéndose a sí mismos,

RkJQdWJsaXNoZXIy MTQwOQ==